Después de Julian Sas, Mike & the Mellotones y la banda de Marcel Scherpenzeel y otros informes a escuchar, lo que marcha en los blues son los "Bullfrog Blues Machine", otra banda de los Países Bajos. Con "Blue Tattoo" presenta el segundo álbum después de "Buckle-up" (2000).
Acompañan al líder de la banda y guitarra Hans Klerken, Marcos Spronk a los teclados, Chris Janssen en el bajo y Harry Steverink en la batería.
La banda toca principalmente material original, inspirado en los legendarios blues de Muddy Waters, Sonny Boy Williamson y Willy Dixon. A pesar de que la banda ha desarrollado un estilo propio, principalmente por medio del juego de guitarra intrincado y contundente de Klerken, las influencias de las generaciones de blues estadounidenses más antiguas y jóvenes son reconocibles: Walter Trout, Rory Gallagher, Stevie Ray Vaughan, Albert Collins, Smokin 'Joe Kubek y Coco Montoya, por nombrar solo algunos.
Los doce títulos de este CD son composiciones originales, la mayoría de las cuales pertenecen al cerebro del cuarteto, Hans Klerken. El bajista Chris Janssen aporta tres temas, Mark Sponk (teclados) uno.
Bullfrog Blues Machine a entrado en el mundo del blues contemporáneo. Son implacables en su búsqueda de la perfección y el reconocimiento en todo el mundo de los blues los avalan, y este trabajo encuentra ese atuendo a su música.
Lejos de lo ordinario, los Bullfrog tienen la habilidad de escribir blues eléctrico fresco y original mientras mantienen gran parte de la "sensación" tradicional. Desde ritmos funky blues a través del arenoso estilo del delta, trabajos de guitarra deslizantes, blues urbanos sucios y de vuelta a vibraciones ingeniosas de jazz, estos chicos son algo realmente especial.